El desarrollo inmobiliario "barrerá" algunas de las construcciones más emblemáticas de la playa Mansa | Se proyectan modernos edificios en altura en lugar de algunos célebres chalets
Algunos de los rasgos más característicos de la fisonomía esteña están a punto de cambiar. Edificaciones de gran valor que conferían un aire majestuoso al barrio Pinares serán demolidas. En su lugar se levantarán modernos edificios.
El clásico perfil del barrio Pinares sobre la Playa Mansa de Maldonado, caracterizado desde los años cuarenta por grandes fincas desarrolladas en extensos predios poblados de pinos marítimos, será historia en poco tiempo más cuando al menos cinco de sus emblemáticas casas sean demolidas para construir edificios de planta baja y cuatro pisos.
Una de las casas más suntuosas de esa zona, "El Poseidón" de Laguna del Diario, fue adquirida el pasado verano en una de las cifras más altas que recuerda la historia de la actividad inmobiliaria de Maldonado y Punta del Este con el objeto de levantar en su lugar tres bloques de cuatro pisos.
El nuevo eje de inversión inmobiliaria se desarrolla a lo largo de veintiuna manzanas frentistas a la rambla de la playa Mansa, entre las paradas 25 y 40, donde se encuentran unos quince edificios de cuatro pisos, más de treinta casas de gran tamaño, cinco de ellas para demoler y una decena de terrenos que están en la mira de los inversores para desarrollar complejos en altura con las mejores amenidades.
A partir de la reforma de la ordenanza de la construcción para la zona de Pinares, votada en la anterior administración del intendente Óscar de los Santos, el costo del metro cuadrado sobre la rambla de Playa Mansa aumentó un 300% a partir de la demanda por construcción de complejos en altura.
DE PELÍCULA. La particularidad de esta zona de la capital departamental, que en los hechos oficia de entrada a la ciudad de Punta del Este, quedó inmortalizada en la película "Piel de Verano" del año 1961 protagonizada por Alfredo Alcón y Graciela Borges con la dirección del desaparecido Leopoldo Torre Nilsson.
La historia, de la que participaron varios pobladores de la zona como actores de reparto, transcurre en una de las grandes fincas que aún hoy se levanta sobre la rambla pero que su futuro parece estar definido por las vicisitudes del mercado inmobiliario.
El escenario no fue elegido al azar por el famoso director argentino, conocido por su afición al casino Nogaró donde dejó varios centenares de miles de dólares ganados en sus clásicas películas. En realidad, Torre Nilsson con lo que ganaba en cada película compraba una casa en Pinares. Cuando el casino le llevaba buena parte de sus ingresos vendía o hipotecaba su residencia para poder concretar su nuevo negocio inmobiliario.
Un joven argentino, protagonizado en la película por Alfredo Alcón, elige a esa zona para poder sobrellevar un período determinante de su vida en paz, soledad, en medio de un bosque de pinos y frente al mar. La película es también una postal del barrio Pinares de Maldonado.
La modificación de las normas de construcción, aprobadas durante el anterior período del intendente Óscar de los Santos, generó un boom inmobiliario entre las paradas 25 y 40 de la playa Mansa, donde al menos cinco de las paradigmáticas fincas que dieron su particular característica a la zona, fueron compradas para demolición y nuevos desarrollos.
En su lugar, se levantarán nuevos complejos, dotados de lujo y las más diversas amenidades, compuestos por planta baja y tres plantas.
NUEVA ORDENANZA. El cambio de la ordenanza, en realidad, autorizó de nuevo a construir bloques de edificios de planta baja y cuatro pisos que había sido prohibido por la modificación de la ordenanza aprobada durante la gestión del fallecido intendente Domingo Burgueño. Antes de esa modificación estaba permitida la construcción de edificios en altura. Esto permitió que varios complejos fueran construidos en los años ochenta y noventa. Luego, la anterior modificación solo permitió casa habitación.
A partir de la aprobación de la nueva modificación de la ordenanza de la construcción el mercado se disparó pasando el costo del metro cuadrado entre US$ 200 y US$ 300 a US$ 800. En las últimas semanas uno de los diez terrenos que todavía quedan libres, de 3.700 metros cuadrados fue comprado por un grupo inversor extranjero en US$ 2.400.000 dólares.
EMBLEMÁTICO. "El Poseidón", una de las paradigmáticas mansiones de Punta de Este, diseñada en 1978 por el arquitecto Samuel Flores Flores, se demolerá en los próximos meses.
Fuentes del mercado inmobiliario aseguraron a El País que un grupo inversor desembolsó entre siete y nueve millones de dólares para hacerse de los once mil metros cuadrados de tierra donde se levanta "El Poseidón". El vendedor es un multimillonario noruego que no pudo resistir la oferta concretada por los ahora poseedores de la tierra ubicada frente a Laguna del Diario.
En su lugar se levantarán tres bloques de tres pisos y planta baja diseñados por el estudio del arquitecto argentino Mario Roberto Álvarez, responsable de otras obras de importancia en la zona como las torres Tiburón de la playa Brava. Ubicada en la ribera oeste frente a la playa Mansa, "El Poseidón" fue construida a pedido de su propietario, el desaparecido industrial argentino Arnaldo Martinenghi. El magnate falleció en 2001 a la edad de 74 años, luego de haber sido uno de los más importantes contribuyentes de campaña del ex presidente Carlos Saúl Menem. Martinenghi era además un destacado criador y propietario de caballos de carrera. Ya en el ocaso de su carrera confesó en una entrevista periodística que había terminado al borde de la bancarrota. De algún modo, "El Poseidón" encarnó el esplendor de aquellos años.
La casa se desarrolla en unos mil seiscientos metros cuadrados con ocho dormitorios en suite, living, comedor, bar y otros sectores.
"El Poseidón" fue el lugar elegido en reiteradas oportunidades por el entonces presidente argentino Carlos Saúl Menem para pasar sus días de descanso en el Este. Menem siempre llegaba acompañado por el empresario Mario Falak, la funcionaria María Julia Alsogaray y la vedette Graciela Alfano.
Su característico perfil desaparecerá ahora de la ribera sobre la Mansa para dar paso a una nueva construcción y al paso inexorable de la historia en la península.
La cifra
300% es lo que aumentó el precio del metro cuadrado sobre la playa Mansa desde que se aprobó la nueva ordenanza en Maldonado.
Las otras fincas que desaparecerán para dar lugar a nuevos complejos edilicios
La lista se completa con un conjunto de edificaciones de largo pasado histórico. El chalé "La Terraza", construido en los años sesenta en la esquina de la rambla de Playa Mansa con la calle Sirio sobre la parada 26 también será demolida.
En su lugar se levantará el complejo "Sunset 26" con unidades de tres dormitorios en suite y de tres dormitorios con servicio. "La Terraza", fue seleccionada en marzo del año 1967 para alojar al entonces dictador paraguayo Alfredo Stroessner, que llegó a Punta del Este para participar de la conferencia de presidentes realizada por entonces en el hotel San Rafael.
La casa "Cielo e Mare", construida en un terreno de ocho mil metros cuadrados ubicado en la esquina de la rambla de playa Mansa y la parada 28 de Pinares también fue comprada para demolición. En su terreno se construirá el edificio "Lumiere Cielo y Mar" con apartamentos de dos y tres dormitorios en suite con y sin dormitorio de servicio.
La firma montevideana Zulamian levantará otro de tres pisos con planta baja a la altura de la parada 35 de Pinares. En la parada 36 se construirá el edificio "36 Park" con uno, dos y tres dormitorios con superficies desde los 72 a los 136 metros cuadrados.
En la parada 37 y la rambla de Playa Mansa se construirá el complejo "Ville de Mer" con quince semipisos de 270 metros cuadrados y un dúplex de 330 metros cuadrados.
En la parada 39 otro complejo, denominado "39" prevé unidades de dos y tres dormitorios. En la parada 40 de la rambla, el edificio "Azure", se suma a los demás con unidades de 1, 2 y 3 dormitorios.
El País Digital
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